Los hilos que tejen vida


VI FESTIVAL DE EXPRESIONES RURALES Y URBANAS. “Bordando y Tejiendo la Memoria de Nuestro Territorio”
Los hilos que tejen vida

Por: Domingó. Ilustrador e investigador cultural.


El festival de Expresiones Rurales y Urbanas en su VI versión se posicionó como uno de los eventos más genuinos de encuentro y diálogo de conocimientos entre organizaciones de campesinos y organizaciones urbanas que trabajan por la protección del medio ambiente, la cultura, el bienestar de las comunidades y el mejoramiento de las condiciones de vida de las poblaciones. “Bordando y tejiendo la memoria de los territorios” fue el tema que convocó durante los días 29, 30 de septiembre y 1 de octubre de 2017 a una larga lista de organizaciones campesinas de todo el país, en uno de los barrios más emblemáticos por su rica historia de la ciudad de Bucaramanga; el Barrio La Joya.

Este evento que cada año se fortalece por la participación de las comunidades convocadas, en esta oportunidad mostró una diversidad de experiencias y trabajos capaces de revelar no solo su belleza, sino la autenticidad de las experiencias expuestas. FUNDAEXPRESIÓN que es la principal institución gestora de esta maravillosa idea, puede sentirse satisfecha y animada, ya que su aporte tiene la capacidad de fortalecer procesos de organización social, procesos de generación de alternativas económicas y lo más importante; la conservación del patrimonio cultural  de poblaciones, organizaciones sociales de base y territorios ricos en biodiversidad.


Los días del festival fueron en verdad intensos, los visitantes se integraban a las actividades programadas que se realizaban a toda hora, durante todo el día. El diálogo entre culturas y experiencias distintas se daba de manera natural, el interés por saber y conocer sorprendía a todos los participantes, el conocimiento se expandía por el barrio entre el calor de esos días y la satisfacción de entender las formas que las comunidades tienen para sortear cualquier adversidad.  En su conjunto se podía sentir que la memoria histórica, los conocimientos ancestrales guardados por las comunidades campesinas y raizales, sus culturas, su belleza artística se estrechaban en una esperanza cierta, en una alegría y confianza, capaz de responderle con experiencias de vida, a un país que por momentos nos parece un despeñadero de absurdas decisiones políticas y económicas que afectan el bienestar de todos los colombianos. 


Este festival tiene la capacidad de hacer visible nuestra esencia como país, muestra lo mejor de nosotros, desde una perspectiva auténtica y sencilla. Aquí se pueden encontrar las respuestas a problemas complejos, pues sus expresiones artísticas, las propuestas que mejoran el medio ambiente, la riqueza cultural, las prácticas tradicionales, la recuperación de saberes, parecían por momentos una sinfonía de notas ancestrales, llenas de sabiduría, que se fusionaban entre los habitantes del campo y la ciudad como un todo invariable.



La memoria histórica y los valores culturales que este festival convoca, se pueden sentir, ver y tocar, no son solo una teoría académica, sino una experiencia al alcance de todas las personas. Participar en el festival de Expresiones Rurales y Urbanas es tener la oportunidad de saber, que nuestra mayor riqueza es esa diversidad cultural, que a veces miramos con el rabillo del ojo en medio de las luces enceguecedoras de un modelo económico y de sociedad, que nos invita al extremo consumismo que destruye la vida, por el afán de acumular riquezas en pocas manos. Por ello, vivir este festival sensibiliza nuestro espíritu y nos prepara para un diálogo enriquecedor entre distintos.  Nos permite encontrar las huellas perdidas que nos animan a mirar hacia adelante con confianza, que es un camino que todos podemos aportar para construirlo a partir de saber cómo ha sido nuestra relación con la tierra, el conocimiento que sus habitantes han acumulado como patrimonio cultural, que hoy gracias a estas iniciativas, podemos disfrutar y así abrir la posibilidad de un conocimiento nuevo, que nos permita decidir con más confianza sobre nuestro Futuro. Asistir a este festival es tener la plena conciencia de participar en la confección de un tejido lleno de vida y esperanza, cuyos hilos se hallan en cada persona que sonríe y se asombra con los saberes que este festival ofrece.   




Es así que el festival este año contó con diferentes organizaciones e iniciativas de regiones apartadas de nuestro país. Mostraron su valor cultural, experiencias como el de las comunidades del movimiento social en defensa de los ríos Sogamoso y Chucurí, Ríos Vivos que a través de una exposición de fotografías del rio, dibujos pinturas bordados y artesanías elaborados por las comunidades que han vivido la transformación de su entorno por la construcción de la represa Hidrosogamoso.

De especial atractivo fue la exposición “Nuestros Mundos” de la artista Angie Vanessita, quien durante diez años ha acompañado a diferentes comunidades en su búsqueda de alternativas educativas, incluyentes, pedagógicas, a través de la pintura, el dibujo, la ilustración y la poesía en el encuentro mágico con niños, niñas, jóvenes, padres y madres, pertenecientes a organizaciones sociales, ambientalistas, feministas y comunidades indígenas y campesinas.



Visitada fue la Exposición - Historias de vida y narraciones del Barrio La Joya: Se presentó a partir de las narraciones orales, fotografías, poesías, recortes de prensa, festividades, grupos locales deportivos, culturales y ambientales. Esta   exposición que recordó parte del pasado, presente y visión de futuro del barrio como parte fundamental de la historia del centro de Bucaramanga. Actividad realizada por iniciativa de habitantes del Barrio la Joya (Inés Caballero Rueda- Marina Torres Castro) con aportes y apoyos de la Biblioteca David Martínez Collazos - IMCUT Woman’s Club.

Para los niños y niñas fue de especial interés, la exposición Revoloteando Nuestra Memoria. Experiencia original de grupos de jóvenes campesinas y campesinos, que se han convertido en custodios de la biodiversidad, de las selvas andinas y páramos que a partir del arte y del bordado, plasman el paisaje cuyo elemento fundamental son las aves que tienen albergue en el territorio. Esta muestra recogió un conjunto de dibujos, bordados, tejidos, fotografías, objetos y pensamientos alrededor de nuestras aves. El proceso corresponde a la Escuela “Aprendiendo a Volar con Nuestras Aves”, cuya propuesta pedagógica cuenta con el apoyo de Censat Agua Viva y organizaciones comunitarias de Santander, Cauca, Antioquia y el Eje Cafetero. Lograron llamar la atención de niños que se mostraron prestos a aprender de manos de las expertas campesinas, las técnicas del bordado. 







Expusieron también su trabajo las mujeres integrantes de la Asociación Municipal de Mujeres Campesinas de Lebrija - AMMUCALE, mostraron parte de su historia de 20 años de existencia y compartieron una serie de telones bordados de aquellas semillas y alimentos que sembraron de niñas y aquellas que se siembran en la actualidad, haciendo una reflexión sobre lo que se ha ido perdiendo con los monocultivos en su territorio. 


Hasta las gallinas y los gallos criollos, tuvieron aquí su espacio. Durante 5 años la Fundación Huellas de Santander y otros colaboradores han realizado el Festival de la gallina y el gallo criollo en el corregimiento de Cachirí, municipio de Suratá. Esta es una iniciativa que tiene la capacidad de relacionar la economía campesina, con la recuperación cultural de especies criollas, que no solo forman parte de nuestra historia, sino que son una alternativa integral entre la protección del medio ambiente y la nutrición de las familias campesinas. Se expusieron 24 fotografías de distintas aves domésticas y textos con descripciones de las especies, particularidades, tipos de huevos, dibujos de niñas y niños, como parte de la tradición campesina y de las formas de economías locales que se han sostenido por generaciones.




Una de las actividades seductoras de este festival lo constituyó la exposición y talleres sobre semillas nuestras. “Lo que somos y de dónde venimos” realizada por Los Custodios de Semillas Criollas de las asociaciones campesinas de Santander y Norte de Santander, con el apoyo de organizaciones como Grupo Semillas, quienes han preservado decenas de variedades de semillas (yucas, maíces, cacaos, frutales, forestales, etc.) exhibieron parte de este trabajo donde presentaron mediante canastos, gabinetes, carteleras, artesanías, textos, alimentos transformados y fotografías parte de su importante trabajo. Hicieron gala de su conocimiento que compartieron con todos los asistentes, logrando inquietarles sobre la importancia de las semillas criollas, como valor cultural nativo, ya que son herencia de nuestros ancestros, conservadas en manos campesinas y aborígenes por generaciones. La semilla criolla aporta no solo a nuestra identidad nacional, sino que es un patrimonio genético, digno de su defensa por parte de campesinos y nativos, cuya conservación y cuidado permite asegurar a las generaciones futuras, seguridad alimentaria y nutricional. 




Junto a estos valores culturales se presentó con mucho humor y reflexión la Exposición Festival Internacional de Caricatura “Mega Minería. No Todo lo que Brilla es Oro”. Una experiencia gráfica de artistas del mundo, que se realizó en Calarcá Quindío y que en el marco de este festival, hizo las delicias del público, ya que los caricaturistas invitados de importancia nacional, realizaron caricaturas en vivo a todos los asistentes. Participaron los caricaturistas José Arles Herrera - maestro Calarcá. José Alberto Martínez - Betto (El Espectador). Marco Antonio Pinto, Pintacuadros.  Edilberto Ardila, Argon. Luis Domingo Rincón, Domingó. Cesar Almeida, Kekar.  El público además de gozar con las caricaturas, pudo reflexionar sobre el tema propuesto donde se podía observar que la vida, el agua, el patrimonio cultural y ambiental, valen mucho más que la avaricia destructora de la naturaleza.










Muchas más actividades se hicieron presentes enriqueciendo este festival como la Exposición, Las Abejas y la Colmena, un acercamiento al entorno de las abejas exhibiendo una réplica de colmena elaborada por las familias campesinas del Colectivo de Reservas y apicultores del municipio de Santa Bárbara.  La maratón papel hecho a mano: Organizado por Eco-Emprender, bajo la dirección de Jovana Uribe quien orientó la fabricación de papel elaborado manualmente.

La danza contemporánea también se hizo presente con la obra “Pueblo de Hilos” dirigida por Eugenio Cueto Barragan. Esta obra concebida para espacio público plantea metáforas alrededor de actividades realizadas en el procesamiento de la fibra de fique, como el corte, desfibrado, lavado, escarmenado, hilado, tinturado, tejido y engomado, usando en escena diferentes elementos artesanales que se utilizan en las actividades del hilado de fique, producto de gran historia en Santander. 








De complemento se realizó el Foro de Memoria Histórica Ambiental, en la que participaron las comunidades invitadas, habitantes del barrio La Joya y ciudadanos de Bucaramanga que se integraron en este festival.

Como marco general todas las personas pudieron asistir al mercado Campesino. Una exhibición y venta de productos sanos, cultivados por campesinos de la región que el domingo 1 de octubre se tomaron la calle principal del Barrio La Joya, para ofrecer el resultado de su esfuerzo diario, realizado a través de experiencias innovadoras en cultivos agroecológicos y productos que agregan valor a los productos de origen agropecuario, que realizan en varias regiones de Santander.   










Es pues este festival una experiencia estética,  una muestra de integración entre el campo y la ciudad a partir de propuestas y experiencias culturales que enriquecen la vida de todas las personas que aquí participan, formando una nueva conciencia, capaz de proteger la vida a partir del diálogo enriquecedor de la cultura, sus expresiones artísticas, sus valores históricos patrimoniales  y lo mejor que los colombianos puedan tener, en el momento de construir un país incluyente,  donde su mayor riqueza es la diversidad cultural que ofrecen todas la regiones de Colombia y que aquí se hacen visibles, como una muestra de esperanza tejida entre todos. 


Participación de la Corporación Compromiso y las organizaciones de la región de San Vicente de Chucurí en el VI FESTIVAL DE EXPRESIONES RURALES Y URBANAS. “Bordando y Tejiendo la Memoria de Nuestro Territorio”.



Comentarios